Una relación no muy conocida

Entre el deporte y el medio ambiente hay una relación tan importante como compleja, que no siempre es percibida como tal, a menos que se relacione con actividades que se realizan en el exterior y, aun así, no siempre se valora que las actividades deportivas también pueden ser una práctica sostenible.

Cada actividad deportiva (individual, colectiva, profesional o amateur) tiene un efecto sobre su entorno, ya sea de forma directa o indirecta, por tanto, es necesario saber cuál es la huella de carbono asociada a la práctica deportiva y cómo es posible reducirla, mejorando de esta forma la incidencia que dicha actividad tiene en el medioambiente.

¿Cómo incide el deporte en el medio ambiente?

Transporte

Cada desplazamiento que requiere el uso de algún tipo de combustible derivado del petróleo, es dañino para el medioambiente. Y en el deporte hay muchísimos traslados: para entrenar, para la disputa de cada fecha de los torneos, para que acuda el público y/o los proveedores y un largo etc. La solución podría venir de la mano de la movilidad eléctrica, que poco a poco pretende ser global e integral.

Energía

El consumo energético asociado a los deportes es enorme, puesto que no solo depende de la electricidad que se puede emplear para las etapas previas a un evento o en el transcurso del mismo, sino que también influye la demanda de los hogares, empresas, hospitales y una gran lista de institución públicas o privadas, que los siguen y visualizan.

Si bien ya hay muchas instituciones deportivas que se han decantado por producir su propia electricidad a partir de fuentes de energías renovables, aún falta muchísimo para conseguir que el costo energético de los deportes, deje de ser pernicioso para la salud del medio ambiente del mundo entero. 

Indumentaria y accesorios

Todos los elementos que se relacionan con el deporte suelen contener fibras sintéticas y plásticos, elementos derivados del petróleo, que se degradan muy lentamente y que podrían ser muy dañinos para el medio ambiente. Cambiar por materiales de producción y desecho más sostenible o reutilizar y reciclar, son medidas medioambientalmente saludables. 

Más educación

Sin lugar a dudas, cuando se habla de eventos que mueven multitudes la palabra clave que distingue a los que cuidan o no el medioambiente (y todo lo demás) es educación. Quienes la tienen y están informados, se llevan con ellos o depositan correctamente la basura que generan, evitan el desperdicio de alimentos o acuden a los eventos deportivos de la manera menos contaminante.

Al resto, no importa si son deportistas de élite, grandes entrenadores o público en general, les hace falta mucha educación para entender que la sostenibilidad no es un término de moda, es una actitud necesaria y aplicable a todas las actividades de los seres humanos, si pretendemos seguir teniendo un planeta al que llamar hogar.

Fuente: Chile desarrollo sustentable